
Por Francisco Antonio Ramos García y José Miguel Dorta Suárez.
A propósito de la circulación en Cuba del Marta Abreu, la caridad como energía creadora, escrito por Josefina Toledo.
De eso pretende convencernos la escritora Josefina Toledo en su reciente libro “Marta Abreu, la caridad como energía creadora” editado por Ciencias Sociales el pasado año y vendido aquí en Santa Clara profusamente durante la reciente Feria del Libro. Para tal aseveración la autora se vale de varias citas de cartas de Marta Abreu a su amiga y confidente Teresa Quijano y de unos cuadernillos consultados por ella en el Fondo Marta Abreu de la Biblioteca Nacional José Martí.
La autora nos cuenta: “Pero el sufrimiento acaso más lacerante – y más humillante- de Marta Abreu en París fueron las infidelidades de su esposo Luís Estévez Romero…” (1). A continuación pasa a “demostrar” lo afirmado:
“En la carta que le envía a su amiga y confidente habanera Teresa Quijano, con fecha 18 de febrero de 1896, Marta le cuenta que su hijo está muy solicitado por las muchachas francesas y que: “(…) se alborota bastante con ellas. Si usted lo viera no lo creería, se pone verdaderamente ridículo, (…) igualito al padre, cuando está entre muchachas, que se cree que todavía está en la edad de hacer conquistas(...) Le aconsejo que nunca venga a Par&
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